En la primavera de 1829, el escritor norteamericano Washington Irving visitó Granada en su viaje por España como agregado de su embajada. A pesar de una corta estancia de mes y medio, la ciudad nazari y, en concreto, la Alhambra despertaron en él una gran fascinación, que marcaron su obra. Resultado de ello son sus célebres Cuentos de la Alhambra, donde recopiló las historias que, según él, escuchaba de los locales. Los Cuentos revelan un patrimonio vivo, un espacio cotidiano ya la vez extraño, exótico e incluso demoniaco para los granadinos. Quizás sea esa mezcla de cercanía y misticismo la que ha convertido su obra en el manual por excelencia de la fortaleza roja en la actualidad. La Alhambra marcó a Irving tanto como Irving ha marcado la Alhambra.

Desde su fundación en 2018, la compañia granadina Mitra Teatro ha apostado por un teatro contemporáneo de inspiración clásica. En esta ocasión, parte de un texto escrito desde el corazón de Granada para traerlo a la contemporaneidad, con una puesta en escena de múltiples lenguajes teatrales. El espectador sentirá la belleza y el misterio que a Irving le evocó la Alhambra, llena de historias de antiguos tesoros dejados atrás por los habitantes de Al-Andalus, romances de frontera, princesas encerradas deseosas de amor y otras leyendas fantásticas.